Hace
mucho tiempo que no se habla de deporte en el entorno del Deportivo. Deuda, Hacienda, juzgados, acreedores, administradores, jueces, elecciones a la
presidencia y demás temas extradeportivos copan la actualidad del conjunto
blanquiazul.
“Once upon a time...” Así podría empezar este texto que trata el pasado presente y futuro de un equipo de fútbol. Y lo hace así porque parece que hablamos de historia, de recuerdos lejanos, y no de algo que debería ser lo habitual, fútbol, solo fútbol.
En A Coruña, a la hora del café o en el momento el
cigarrillo, no se habla de la derrota frente a Las Palmas en Riazor, o del buen
momento de forma del canterano Luís Fernández. Las charlas se centran en un
presidente que se fue y en otro que acaba de llegar. En la deuda acumulada durante
los últimos 25 años y sobre si ésta ha merecido la pena teniendo en cuenta los éxitos
deportivos.
Los términos jurídicos están a la orden del día, se utilizan
palabras como “quita”, “pieza de calificación”, “convenio de acreedores”, “deuda
privilegiada”, etc. Cuando se tendría que hablar simplemente de goles, puntos y fichajes.
La atención del público se desvía de los 105x68 de Riazor,
las miradas se dirigen a al palco presidencial. Placas, reconocimientos, pitos
y aplausos para despedir al que era el gestor de la entidad.
Pocos destacan el dato de que el Deportivo ocupe la segunda
posición de la liga a pesar de no conseguir ninguna victoria en los últimos partidos.
Pero todos conocen el número de acciones que manejan los candidatos a la presidencia
del Dépor.
Tras más de un mes de injurias, calumnias, “tiras y aflojas”,
amenazas, después del “todo vale” para conseguir un par de votos, la guerra
llega a su fin.
Llega el esperado 22 de enero, el Dépor tiene un nuevo presidente. Y tú te despiertas, notas la boca seca y pastosa, dolor muscular
y una sensación general de malestar en el cuerpo, algunos le llaman “resaca”,
quizás esta “fiesta” ha durado demasiado.
Quiero pensar que este es el fin de un proceso complicado,
largo y duro de la historia del Deportivo, pero dudo que así sea.
Me conformo con poder volver al principio, y decir: “Érase una vez... un club que también jugaba al fútbol”.
Forza Depor
No hay comentarios:
Publicar un comentario